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Aroma: presenta una nariz aromática, con notas de vainilla, flores cortadas y un toque tostado. Poco a poco va resultando más dulce y cremoso, con aromas a cítricos frescos y tarta de limón.
Paladar: es ligero y suave, cada vez más y más floral. Tiene un paso crujiente con sabores a glaseado de mantequilla, tarta de limón y fresias.
Acabado: es herbáceo y seco.
Glenkinchie 12 Años es un whisky ligero y delicado a la vez que dulce y cremoso con una fragancia floral sutil.
En el Sur y el Este de Edimburgo, donde las altas y verdes colinas de Lammermuir Hills comienzan a llegar en dirección norte hacia el Firth of Forth, se encuentra la región agrícola de East Lothian. En este "jardín de Escocia", crecen acres de cebada en campos alimentados por el agua que fluye suavemente hacia abajo de las colinas. Esta cebada de oro fue destinada a la destilería Glenkinchie cuando en 1837, los agricultores locales, John y George Rate se convirtieron en los primeros propietarios de licencias registradas. Dejaron la producción en Glenkinchie en 1853, pero las instalaciones se abrieron de nuevo en 1890, cuando un consorcio de comerciantes y mezcladores de vino de Edimburgo y Leith reformaron la Glenkinchie Distillery Co. Ltd.
Glenkinchie fue finalmente reconstruida en la década de 1890. Tardó diez años, pero el resultado fue la destilería victoriana que hoy conocemos, con sus característicos edificios de ladrillos rojos, casas para los trabajadores e incluso con su propia pista de petanca.
Todavía se mantiene la tradición; por ejemplo, todavía se utilizan seis tinas de madera para la fermentación, dos hechas de pino de Oregón y cuatro de alerce canadiense. Sus dos viejos y grandes alambiques de cobre son también su rasgo distintivo, ya que están entre los más grandes de la industria y juntos producen unos impresionantes 1,3 millones de litros al año.
